MICROBIOTA Y DISBIOSIS INTESTINAL
QUÉ ES LA MICROBIOTA INTESTINAL
CLASIFICACIÓN DE LAS BACTERIAS INTESTINALES
Si hablamos de bacterias intestinales exclusivamente, nos encontramos con 2 clasificaciones muy utilizadas, una de ellas según taxonomía, es decir, agrupando a las bacterias en filos o familias en las que todas ellas presentan similitudes genéticas. Y la segunda clasificación se basa en la agrupación de las bacterias dependiendo de su funcionalidad, es decir, se hallan agrupadas según su función; (si realizan las mismas o funciones que se complementan entre sí, con un mismo propósito o finalidad en el organismo humano).
ATENDIENDO A SU CLASIFICACIÓN EN CUANTO A LA FUNCIONALIDAD CONOCEMOS 3 GRANDES GRUPOS DE BACTERIAS INTESTINALES:
1-BACTERIAS MUCONUTRITIVAS: mantienen el moco de la mucosa intestinal. Este moco es importante porque forma parte de la barrera intestinal contra patógenos, es por lo tanto parte de nuestra primera línea de defensa. Estas bacterias también ayudan a la digestión, absorción y síntesis de muchos nutrientes.
2-BACTERIAS REGULADORAS: este grupo se divide en dos grandes grupos más; BARCERIAS REGULADORAS INMUNOLÓGICAS que regulan la activación del sistema inmunitario local e Inducen frente a agentes patógenos o agentes extraños a la respuesta inmunitaria innata o inespecífica. Y el segundo grupo formado por las BACTERIAS REGULADORAS DEFENSORAS, estas bacterias crean junto con el mucus una barrera física tapizando la pared intestinal. Mantienen el pH en la luz intestinal y conservan la permeabilidad adecuada de la mucosa.
3-BACTERIAS PROTEOLÍTICAS:
son importantes porque metabolizan proteínas en el intestino grueso pero al mismo tiempo, generan sustancias tóxicas como las aminas que entre otras alteraciones, van a dificultar el crecimiento de nuestra microbiota reguladora. Por lo tanto son necesarias pero en cantidad menor. De modo, que si se genera un sobrecrecimiento en número de estas bacterias proteolíticas se transformarán en lo que se denomina
patógenos facultativos.
LO IMPORTANTE ES EL EQUILIBRIO
Por lo tanto, lo importante es mantener un equilibrio en los índices de nuestra microbiota. Un ejemplo, los lactobacillus, su exceso en nuestro organismo está asociado a SIBO, a la enfermedad de Cronh , a la artritis reumatoide y al estreñimiento severo. En cambio, la carencia, se asocia a estrés crónico, intolerancia y malabsorción de lactoctosa y/o fructosa y al síndrome del intestino irritable.
Un ejemplo de la RETROALIMENTACIÓN, de este beneficio compartido que mantenemos con nuestra microbiota y tomando como ejemplo a la akermansia, LA BACTERIA HASTA EL MOMENTO MÁS IMPORTANTE DENTRO DE LA MICROBIOTA MUCONUTRITIVA, sabemos, que esta bacteria, la akermansia, degradará la mucina (las mucinas son proteínas muy pesadas que podemos encontrar en el moco del intestino, pero también en el de los pulmones y tracto genital). Estas mucinas crean una red para retener todo aquello que puede ser perjudicial para nuestro organismo y al tiempo que degrada la mucina estará generando glicanos y oligosacáridos que serán aprovechados por otro tipo de bacterias productoras a su vez de ácidos grasos de cadena corta como el ácido butírico, el cual alimentará a las celulas epiteliales (son un tipo de células que recubren el interior y el exterior del cuerpo, como el intestino, la piel y otras digamos, cavidades como el tracto urinario o la venas y arterias), y para finalizar, a su vez estas células epiteliales generarán el moco protector de la mucosas cuya finalidad es entre otras, la prevención de la invasión por microorganismos patógenos.
La AKKERMANSIA MUCINIPHILA produce propionato, acetato y oligosacáridos y estimula además la secreción de péptidos antimicrobianos, Un aumento en la población de la bacteria Akkermansia Muciniphila está asociado a un aumento de la biodiversidad de la microbiota intestinal, en cambio una disminución está asociada a Inflamación intestinal (síndrome del colon irritable, crohn y colitis ulcerosa) problemas metabólicos (sobrepeso obesidad, hipertensión diabetes, etc) y problemas inmunológicos, sobre todo alergias.
Si tomamos como ejemplo a las bacterias proteolíticas, ya hemos comentado que son fundamentales para nuestra salud porque metabolizan proteínas en el intestino grueso pero cuando se desequilibran o se multiplican en
exceso nos van a generar por un lado,
un aumento del pH intestinal mediante la formación de amoníaco, una producción en exceso de aminas biógenas (metabolitos tóxicos), un aumento de la producción de gas y una sobrecarga hepática por NH3.
Por lo tanto, sabemos que las bacterias proteolíticas que colonizan de manera natural el intestino, están presentes en muy pequeña cantidad (< 0,01% del total) y que se comportarán como patógenos facultativos de aumentar su número. Las toxinas que generan, si llegan a atravesar la pared intestinal debido por ejemplo, a una permeabilidad alterada de la mucosa intestinal, pueden provocar alteraciones generales orgánicas (inmunitarias, intolerancias alimentarias, etc).
DISBIOSIS INTESTINAL
La DISBIOSIS INTESTINAL es la alteración en la composición y la funcionalidad de los microorganismos que componen la microbiota, es un desequilibrio en el cual sobrecrecen ciertos microorganismos patógenos y disminuyen en número, otros que son necesarios para realizar funciones vitales para mantener nuestra salud.
CÓMO PODEMOS ANALIZAR NUESTRA MICROBIOTA INTESTINAL
Podemos hacerlo a través de una completa analítica de heces. Cuando enviamos las heces al laboratorio para que las analicen, lo que encuentran en la materia fecal en referencia al ADN de microorganismos son 4 grupos,
bacterias
en un porcentaje elevado y en menor cantidad
arqueas, eucariotas
donde se incluyen hongos, parásitos y también
virus. Además de restos de comida no digeridos, células de las paredes intestinales, mucus, etc.




